Hoy se celebra el día del niño.
Con frecuencia pensamos en aquellos niños y niñas que no acceden a los Derechos Fundamentales de la Infancia: casa, alimento, educación, protección, etc. Y eso es clave, porque nos ayuda a reaccionar contra un estado de cosas injusto.
Con menos frecuencia pensamos en otras formas de abuso o negligencia en relación a los niños y niñas, más sutiles, pero bien dañinos y de nefastas consecuencias.
El papa Francisco, además, en la homilía de Santa Marta hablaba del “pan sucio” que dan los corruptos a sus hijos, práctica que les arrebata la dignidad; y rogaba rezar por esos hijos.
Hoy, en el día del niño/a, tengamos, pues, presentes tanto a aquellos /as a los que les falta cualquier tipo de sustento material, cuanto a aquellos que, por una falta de ética de sus progenitores y por una idea maquiavélica de que el fín justifica los medios, se les ve arrebatada la dignidad, auqnue posean mucho más de lo que necesitan.
Fonte: Proconcil
